Los días previos al viaje a controlar que este todo, los reels, sus carreteles, las cañas, anzuelos, terminales, plomos, señuelos, una vez que teníamos todo listo allá fuimos, llegamos el sábado a las 5 de la mañana, el guía nos aviso que a las 7:30 nos pasaba a buscar por las cabañas para comenzar lo que seria nuestra primer jornada de pesca, en el viaje la lluvia y los truenos nos daban un mal presagio, cosa que por suerte no fue así. Yendo a lo que nos interesa, mientras el resto del grupo organizabas su equipaje en las cabañas, no pude con mi genio y me dirigí al rio para ver como estaba, el amanecer asomaba en el horizonte y dejaba ver un rio esplendido con aguas bastante claras y los primeros doradillos saltando a metros de la costa, fue así que corrí hasta las cabañas arme mi equipo de spinning, le puse el carretel con multifilamento de 0.12 y sin terminal ni nada le coloque una cuchara giratoria Mepps Black fury Nº 1 y tirando a unos 20 metros de la costa los piques se dieron hasta que el guía llego para comenzar con el día, fueron no menos de 10 los doradillos que tomaron mi artificial, pero los anzuelos no resistieron los embates, por lo cual no pude fotografiar ninguno. Ya en la lancha, navegamos por el lapso de unos 20 minutos antes de realizar los primeros intentos, con morena y sin plomo tirando hacia los veriles, la sorpresa fue tal cuando a Rubén, uno de los integrantes del grupo, apenas arroja un excelente dorado, al cual le calculamos mas de 8 kilos toma la carnada apenas esta toca el agua y le corta todo, era un avance de lo que nos esperaba… para nuestra fortuna ese no fue el único, y entre los cuatro que conformamos el grupo, las capturas en ese día superaron los 30 dorados.
Al medio día justo antes de realizar la parada obligada para almorzar, siento en mi caña un pique muy sutil mientras recogía para realizar otro tiro y ver como se encontraba mi morena, sigo juntando y nuevamente un pique en lo que reacciono y clavo, del otro lado de mi caña, lo que estaba enganchado sale disparado hacia aguas profundas, el guía me grita “no le aflojes que lo perdés, es un lindo pescado….” Después de mas o menos 10 minutos de lucha lo pudimos ver una raya, la cual al momento de pesarla registro 11 kilogramos, la exaltación en la lancha fue notoria y así nos dirigimos a una isla para almorzar. Mientras los chicos encendían el fuego encarno mi caña, le coloco un plomo de 80 gramos y tiro en un gran remanso, aflojo la estrella y voy a comer, mientras comíamos y hablábamos de lo ocurrido en la jornada se escucha mi caña una gran llevada pero que termina antes de que llegue a revisarla, cuando nos disponemos a seguir en busca de otros lugares, junto mi caña y noto como si estuviese enganchada al fondo, le pego un par de tirones como para ver si se suelta y de repente una corrida descomunal me saca mas o menos 100 metros de línea, fue así que batalle con ese animal durante mas de 25 minutos y luego poder dar cuenta de otra raya, esta vez de 21 kilogramos, si tenemos en cuenta que peso 60 kilos, el animal era el 30 por ciento de mi masa corporal, una muy linda lucha la cual le dio un broche al primer día.

Ahora la pregunta es cuando volvemos?............
No hay comentarios:
Publicar un comentario